Este tipo de desayunos los dejo para cuando tengo más antojo de comidas saladas. Como huevo 1 o 2 veces por semana. Siempre debemos de estar variando nuestra alimentación, y a mi me ha funcionado bien así.

Necesitas:
1 puño de kale. Si no encuentras kale, puedes usar espinaca.
El jugo de medio limón.
1/4 de almendras previamente remojadas.
1/2 taza de tomates cherry,
Un chorrito de aceite de oliva extra virgen.
1 huevo, de preferencia orgánico.
Sal de mar y pimienta.
Pisca de comino molido.
En un bowl grande, combina el aceite de oliva y el jugo de limón y ahí mismo agregas el kale y lo masajeas para que se ablande.
Pon a tostar las almendras en un sarten chico hasta que las veas un poquito doradas y retíralas. Se queman muy rápido. Después córtalas en pedacitos.
Corta los tomate cherry en mitades.
Agrega las almendras y tomates al bowl del kale y combina bien.
Agrega comino, y sasona con sal de mar y pimienta.
En un sartén fríe el huevo el aceite de oliva.
Transfiere la mezcla del kale a un plato y sirve el huevo encima.